miércoles, 25 de marzo de 2015


  Como cada día veinticinco de cada mes, intentaremos hacer una nueva publicación en nuestro blog de "Toreros de Tapia", y en esta ocasión, con un matador de toros  retirado recientemente, que sin duda no tiene ningún tipo de desperdicio, que ha sido unos de los matadores que ha enfrentado a  las corridas de ganaderías mas dura que existen y han existido en el circulo de la fiesta taurina, que a pesar de no haberse hecho en las tapias,  sin duda se ha realizado como persona y como torero en una escuela taurina, concretamente en la de Madrid, habiendo tenido tantos miedos en sus comienzos como nos cuenta a continuación,  ha dejado con su paso por los ruedos de España, Francia e Hispano América , un  legado,  una forma de torear  y de poder con los toros como muy pocos.   SIN DUDA HABLAMOS DE

            José Pedro Prados  
                  "EL FUNDI"
  El nombre del Fundí, viene de un apodo de la familia, les llamaban Los Fundís que no sebe por que se lo llamaban pero, que viene desde su abuelo luego su hermano lo cogió como de fundí y el como el nombre de Fundí Chico, hasta que su hermano dejo de ser matador de toros, se quedo de banderillero y lo recogió  José Pedro como testigo de una  dinastía de toreros fuenlabreños .

Sus inicios en esa escuela de Madrid a la que perteneció fueron muy ilusionantes, muy emocionantes, pero también llena de muchos miedos, forjándose dentro de esta escuela, con la suerte de formar parte con un cartel  becerristas que luego se convirtieron en un cartel de máximas  figuras que cruzo toda España de norte a sur de este a oeste,  donde le sirvió de forja con un aprendizaje muy bien estructurado y escalonado que le sirvió de pilar para el futuro de su carrera como matador de toros.

  La primera vez que se presenta en público, fue en el año 81 en el pueblo madrileño de  Aranjuez, sintiendo muchísimo miedo, tanto que lo recalca en varias ocasiones, que ya en el patio de cuadrillas lo paso mal muy mal, que era un crio con trece años, y que tras cortar incluso una oreja, pensó en dejarlo, hasta el punto, que para alternan con  Joselito poco después en Trujillo, le tuvieron que convencer.  Unos miedos que has estado patentes en toda su carrera, llena de altibajos y de tropezones, incluso dejar en algunos momentos de torear,  vistiéndose por primera vez de luces un 15 de Agosto, en el pueblo burgalés Salas de Los Infantes, y debutando de luces sin picadores en Las Ventas con el cartel que perseguiría parte de su carrera de Joselito, Fundí y Bote, pasando mucho paquete, porque Madrid a su criterio es una plaza que impone,   es muy seria y para un chaval cono era él fue un trago y una superación a su vez, incluso dentro de esa escuela, en la que tuvo que rivalizar, con maestros de la categoría de Joselito, Bote, José María Plaza, Carretero, Nino de La Taurina, etc., pero siempre sin amedrentarse y mirando hacia el futuro.

Se siente con el paso del tiempo en el mundo del toro y cuando se empieza a destacar, que cada vez se complica más la cosa, que eres más torero,   se empieza a superar esas metas,  se empieza a ver el cambio de corto a luces, cuando se pasa de novillos sin caballos a novilladas picadas, se va notando la seriedad de los toros, las miradas de esos animales cada vez mas cuajados, las exigencias de los públicos, de los que te ayudan, se siente poco a poco más responsabilidad, miedo,  respeto y muchas más cosas que no se pueden definir.
Toma la alternativa en Villaviciosa de Odón ,  y nos asegura que fueron unas condiciones de mucha  ilusión, pero no claras, toreo su debut con caballos  en Madrid, toreo otra novillada consecutiva  con caballos, y lo paso tan mal, que se le amontono todo,  no lo tenía muy claro con respecto del mundo del toro,  dejando de torear por esto y por qué se le junto con la mili, durante dos años, no tuvo casi tiempo de prepararse solamente con una novillada picada, un par de festivales, y alguna otra cosilla, pero se tiro a la piscina con esa alternativa, como no con el cartel de Joselito, Bote y Fundí, con muchísima ilusión de hacerse matador de toros, pero a la hora de arrancar de cero, con unas circunstancias muy distintas a la inmensa mayoría de los demás, confirmando de forma poco usual, en el coso venteo, con Joselito como padrino y como Bote de testigo, pero a la vez haciendo de testigo Fundí de Bote, que confirmaron el mismo día, al unisonó.

  Ha sido un torero muy reconocido en España. pero en las plazas de Francia ha sido incluso mucho más reconocido, hasta el punto de abrir las puertas españolas y  casi todas por su paso en  los cosos franceses.

Con más de dos décadas en activo en el mundo del toro, han pasado muchas cosas malas y buenas  pero  se queda con todo  con lo que el toro le ha dado a él , aunque también se queda con lo que él,  le ha dado al toro. Se ve reflejado en algunos de los chavales de escuela actual donde es profesor, que algunas veces comentas, este chico no tiene valor y el les responde, que el valor es relativo, que el valor es tener oficio es superarse en cada tarde, y tener mucha afición para conseguir esa superación de los miedos, y si se siente reflejado muy mucho en esos chicos a los que les intenta enseñar e  inculcar lo que él ha aprendido en su paso por este mundo del toro

Le ilusiono la idea de coger las riendas de esa escuela que tanto les ha dado a los tres maestros que ahora son los profesores, pero a la vez le daba miedo de no ser capaz de poder enseñar lo que uno sabía, que es muy fácil de expresar en los ruedos pero que no es fácil de enseñar a los demás,
ayudando diariamente hacer lo que se puede para facilitar el camino y orientar a los chavales que quieren empezar en esto de los toros, recalcando que para ser torero lo primero que hay que tener es mucha afición, entrega y dar todo y entregarse para no solamente llegar a ser figura sino para poderse mantener en este difícil mundo de la fiesta que cada vez se hace mas difícil porque cada vez los nuevos están mas preparados y se innova tanto en el mundo del toro que día a día se ven cosas nuevas.

No siendo fácil tampoco el decidir dejar de torear, cosa que en su caso se agravo no solamente por los altibajos de su carreras, sino por un  accidente con un caballo que le retiro de los ruedos durante una temporada que hizo que ese parón no le dejo de estar al cien por cien, el haber pasado de los veinticinco años en activo, y pensando que hay que dejar vía libre a los chavales que vienen dando fuerte, decidió dejarlo, y pensando que si no concibe la vida sin haber sido torero, porque es una profesión muy grande, muy bonita,  y además no ha conocido ninguna otra vía de vida, y a su vez viendo por el retrovisor de su vida que ha intentado darlo todo, en los momentos claros, en los momentos malos, en los momentos buenos, dándose por satisfecho de que ha hecho todo lo que tenía que hacer en cada momento, pensando siempre en positivo.