"JUAN CUELLAR"

         Gran maestro, el que tenemos el privilegio de presentar para este blog,  Toreros de Tapia, que con una trayectoria impactante, nace en Colmenar de Oreja, Madrid,  el día 1 de Diciembre de 1967, debuta con picadores el 4 de Mayo de 1986, en su pueblo natal, alternando con Sánchez Cubero y Rodolfo Pascual, con reses de Ignacio Pérez Tabernero y uno de Guardiola Domínguez. En 1989 se despide como novillero en la plaza de toros de Las Ventas, más concretamente el día 16 de Mayo, alternando con José María Plaza y Enrique Ponce, con novillos de Manuel Martínez Peñato.  Curro Vázquez le da la alternativa en Madrid el 25 de Mayo de este 1989, en presencia como padrino de Víctor Mendes, y con un encierro de Mª Lurdes Pérez Tabernero, cortando una oreja en el primero y casi cortando otra en el sexto de la corrida, pero sin poder abrir la puerta grande en esta ocasión, pero consiguiéndolo el día 31 de Marzo de 1991 con toros de Dolores Aguirre Ybarra y alternando con Ruiz Miguel y El Soro, cortando una oreja en cada uno los toros de su lote.  El 1 de Mayo de 1992 en Badajoz (España), sufre una gran cogida, precisamente el mismo día que Manolo Montolio encuentra la muerte en Sevilla (España).  Se repite  esta tónica en los años 90 hasta su retirada de los ruedos, y siendo como nos contara en esta entrevista,  profesor en la escuela de toros de Aranjuez (España) hasta el 2006.
  No podiamos hablar de otro matador de toros, sino de el maestro,  Juan Antonio Cuellar Fernandez "JUAN CUELLAR"

       Se le despierta en gusanillo del mundo del toro, porque sus padres siempre tenían vacas de leche, y siempre estaba enredando con ellas, y con los chotos.   Su padre buen aficionado, le lleva a muchas ferias, pero sin perdonar ni una, como no a la de su pueblo natal Colmenar de Oreja.    

   El 19 de Junio 1983 alterno con José Luis seseña que era novillero, en la feria de su pueblo, y  sin tener ni idea de lo que era el torear en serio, paso algo redondo, torero  una vaca a beneficio de los bancos de la iglesia y le corto dos orejas, el rabo  y una pata,  montando el taco, a demás siendo a beneficio de la iglesia,  aprovecho para ganarse la confianza de su madre para que le dejara de torear.  Ese día lo vio Regino Agudo que apoderaba a José Luis seseña, y le dio el paso para que se acercase a la escuela de Aranjuez, donde empezó a entrenar cogiendo consejos de todos los matadores y novilleros que se acercaban por allí en esa época,  Niño de Aranjuez, Luis Milla, Seseña, Ramón de Julio, etc., y con mucho esfuerzo deseando que alguien le dijera, coge los pitones, hazte  un toro, y fijándose en todo lo que los maestros hacían, después de dos años le hicieron un poco mas de caso, fijándose Regino Agudo en él y echando para adelante su carrera, agradeciendo mucho en su carrera como torero a Manolo Chopera, que regentaba muchos de los cosos de España y Francia,  dándole la oportunidad de entrar en muchas ferias importantes.

 

  El 31 de Mayo  de  1990, tuvo  una gran actuación a un toro del Sierro en Madrid,  tarde que todavía recuerda siempre que habla de toros, consiguiendo la oreja mas difícil del serial de San Isidro al sexto toro en ese día,  y recordando otra novillada de Albaserrada, en la que también corto una oreja,  dejando muchísimo gran y buen sabor de boca a los aficionados que asistieron a esta plaza de  Las Ventas.   Realiza en las Ventas más de 30 paseíllos de matador der toros,  sintiéndose torero en todo momento, antes estando en activo,  e incluso en la actualidad sin torear en esas ferias tan  importantes del panorama taurino español y mundial.

  No tiene ninguna persona que sea el pilar de su carrera, porque al final es lo que uno hace e intenta plasmar en los ruedos, pero eso sí, con mucho respeto a los antiguos, a la profesión y a los profesionales que siempre le han aconsejado muy bien, echando de menos en la actualidad, ese respeto a los antiguos,  que son los que te van curtiendo en esto de los toros,  aprendiendo de ellos todos los pormenores de esta fiesta.

    Nos cuenta Juan Cuellar como anécdota el día de su alternativa, que era su actuación número 13 en Las Ventas,  la corrida 13 de la feria y su toro el Nº 13,  que por cierto,  fue un gran toro.  Recuerda otra anécdota  en América, hacer una distancia de Trujillo a Chotas (Ecuador),300, Km en 13 o n 14 horas muy difíciles en autobús,  no es lo mismo vivirlo que contarlo, son  cosas  que dices (  eso solo pasa en la tele),  y a Juan Cuellar,  le pasaron en ese día y en ese sitio tan recóndito de la geografía ecuatoriana, pero luego reconoce que, vivir eso fue una gran experiencia, y a pesar de estas cosas, son muchas grandes satisfacciones  las que ha tenido en su carrera delante del toro, siendo muy difícil decir alguna  de ellas más en concreto, por todas las que ha vivido, en el tiempo de torero profesional  y en activo.

    Trataría de corregir los fallos que ha cometido en su carrera, pero siendo siempre fiel a sí mismos tanto en el toro y en su vida, ganándose el pan por sus propios medios, y dando algunos retoques se podría  haber cambiado algo,  pero agua pasada no mueve molino.

    Manías  ha tenido como todos los toreros, pero siempre haciendo lo que todos rechazaban, siempre con respeto a los compañeros,  sin creer que son supersticiones, sino para quitarse los miedos del toro, pero  casi mas los miedos  a la responsabilidad de no defraudar a la gente que te aprecia y te sigue, siendo aun más el miedo a la incertidumbre y responsabilidad desde que te anuncian en un cartel y hasta ese momento de contacto del toro con el torero,  confesando  que unos de los colores  que apreciaba, son blanco y oro,  que le dio suerte el día de la alternativa y antes que ese,  uno rosa palo  y oro que tuvo hasta que se hizo  trizas  del buen bajío que le traía este, además por que fue regalado por una peña suya de Cuatro caminos en Madrid. 

    No se ha fijado en ningún torero en concreto, pero su referencia era Paco Ojeda,   recordando también, con mucho cariño a El Viti, siendo su torero de la actualidad,  José Tomas, marcando  una época en el mundo del toro, según Juan Cuellar.

   Se siente orgulloso de haber matado corridas duras, puesto que son en algunas ocasiones toros incluso más nobles de lo que muchos piensan, y además matando este tipo de corridas,  te da un puesto en muchas de las grandes ferias, realmente comenzó a torear otro tipo de encastes más comerciales  cuando casi terminaba su carrera como matador.

  A los chavales que comienzan ahora, les dice que lo primero,  tienen que tener mucho respeto a la  profesión y al público, y luego a partir de ahí,  se pueden conseguir con las cualidades que cada uno tenga,  lo que sea capaz o le dejen de realizar en este mundo de los toros,  viendo fundamental , las escuelas taurinas en la persona de los chavales que no tienen ningún tipo de contacto con el mundo del toro, y que no tienen  ese paso a conocer como acoplarse a esta fiesta, pero para bueno o malo  hoy tienen todo, criticando en el buen sentido de la palabra, los impedimentos para  ingresar a las escuelas, con el tope de dieciocho años para la matricula de estas, reconociendo,  que el toro no pide el carnet, creyendo como profesor  que fue de la escuela de  Aranjuez, que  lo del tope de edad es como una criba a la hora de seleccionar a los chavales que ingresan en una escuela,  para no quitar oportunidades a esos  chicos que si de verdad quieren ser toreros desde pequeños, teniendo en ocasiones un des bordaje y haciendo que a los que si llegan se les pueda atender aconsejar y enseñar como merecen.

    El no ha vivido el ser un torero de capeas, pero si buscarse la vida desde muy joven siendo un Torero de Tapia, reivindicando la actual no asistencia de los chavales que quieren empezar a los tentaderos, aprendiendo no solo de lo que tu realizas en ellos, sino incluso viendo a los maestros de torear, contando que incluso siendo matador de toros en activo, se llevo a un chaval de tentadero, de tapia y luego le reprocho este,  que solo había pegado cuatro muletazos, dando a entender Juan Cuellar, que los tiempos han cambiado, que en su época de comienzos el se desvivía por  un solo capotazo y ahora, no aprecian un día de campo y de enseñanzas, incluso dando unos pocos muletazos, porque luego vemos lo que está pasando en la actualidad, que tienen que torear en Las Ventas (Madrid),  para que luego le pongan en los pueblos, y muchos de ellos no están preparados,  cambiando  por cierto la monotonía que existía,  de torear y rodarse en los pueblos,  para luego ir preparado a  Madrid. 

     Nos dice que el siempre ha escuchado  incluso cuando estaba en activo, que la fiesta de los toros estaba muy mal, y cree que esto de los toros  sobrevive a todo, siendo el problema,   las artimañas políticas que no tienen nada que ver con el mundo del toro en sí, además esta fiesta no lo quita nadie, por tan bonita, tan nuestra, y  por gente a la que da de comer, pensando que esto cambiara en breve para ser lo que ha sido.  Refiriéndose al  toro  de la actualidad, cree que no hay que confundir,   la fiereza de un toro con la bravura, haciendo un toro que de miedo,  porque si no es así, no se encuentra la chispa que necesita la fiesta, preocupándose los ganaderos por el motor de los toros, y en hacer un toro  que de,  lo que la fiesta necesita, sin olvidar a   esos encastes que ya casi se están extinguiendo,  y que posiblemente llevasen a la fiesta a la posición que se merece.

  Juan Cuellar ha sido un referente en su época  y  en su comarca, sigue en la fiesta, ayudando a un chaval que se llama Juan Miguel, en estos momentos Novillero, organiza como empresario algunas fiestas e incluso en ocasiones las  fiestas taurinas  en su  pueblo,  dedica todo el tiempo que puede a su familia, al campo e intentar que esta fiesta tan bonita de los toros sobreviva.