"PABLO MORA"

   Comienza en el mundo del toro, por una de las cosas que ahora en estos momentos se echan de menos en el mundo del toro, que son las corridas televisadas, en este caso en Telemadrid, a las que en su casa estaban acostumbrados  a ver y a las que Pablo Mora, le gustaba echar un vistazo, hasta que un día ve un anuncio de la escuela de toreros de Morazarzal (Madrid), en el que se impartían durante dos meses clases gratis, y a las que se apunto.

  Las consecuencias vendría más adelante, cuando en esta escuela se les imparte una clase práctica con becerras, y la que marco a Pablo Mora, despertándole el gusanillo de la tauromaquia, incluso sin dejarle de dormir en esa noche, pasando por su cabeza los duendes del mundo del toro, y pensando que este era su futuro, ser torero.

  Cuando en su casa dice que quiere ser torero, no se le apoya, y su madre le dice que es un mundo muy difícil. que solo llegan unos cuantos, pero que si no la defrauda con los estudios le dejaría de intentarlo, con lo cual, llegaron a un acuerdo y cada uno puso su parte, hasta el momento, de que en la escuela ale dicen que aprende muy pronto y de que tiene mimbres para poder ser algo el mundo del toro, con lo cual se integra en esta escuela  e intenta tirar para adelante.

    Opta por la escuela de Morazarzal por lo anteriormente dicho por el anuncio, y  continua en ella, porque les atienden muy bien, se acostumbra a los compañeros, a no tener ninguna pega y a el trato tanto personal, como profesional se les imparte a cada uno de los alumnos, dejando sin sentido el pertenecer a cualquier otra escuela de la Comunidad de Madrid, como Marcial Lalanda o La fundación El Juli.

  Lo que recuerda en su primer paso por la escuela es el consejo de sus profesores como Luis Vázquez, de que si tiene algún tipo de duda que no lo intente, y deje su puesto a otra chaval que lo tenga más claro, que esto es muy difícil y que es muy duro, tanto profesional como sicológicamente, para enfrentarse no solamente a una lucha esporádica con el animal, sino para en un futuro tener que afrontar una temporada entera, día a día.

 

Recuerda su primer becerro, en el que no tenía la edad de torear, y solamente se acerco a hacer quites con un compañero, con la suerte de que el novillo salió muy fuerte y se tuvieron que emplear tanto sus compañeros como el mismo a unos becerros  de Cesar Valencia, pero las peñas se empeñaron en que tenía que matar el becerro como si fuese para él, por como lo había lidiado,  le convencieron y después de hacer una gran faena basada sobre todo en su mano izquierda, le metió un estocadon, que en estos momento todavía no se cree ni él, pero que hizo rodar a el animal y de el cual,  el presidente a  petición del público le otorgo las dos orejas, haciendo esa jornada interminable para él y todos los que le rodeaban, puesto que no podía dejar de pensar en la faena, en como lo hizo y como lo podía haber hecho.

  Su primera temporada fue en el 2011, comenzando en una becerrada, en la que con cinco participantes y seis becerros se les daría la oportunidad de matar el sexto a el que mejor estuviese de esa tarde, consiguiéndolo él con cuatro orejas y un rabo del  Retamar, toreando unas veinte becerradas en ese año.

  Llega el 2012 y es introducido en el certamen de escuelas de tauromaquia de Canal Plus, llegando a la final del certamen, llega a torear en el pueblo de  Pedro Bernardo (Ávila)   con los novilleros punteros de Posada de Maravillas, Javier de Prados, afrontando esa tarde con muy buenos sentimientos aun mas cuando en un quite por chicuelinas se le compara con José Tomas y poniéndolo al año siguiente ya como actuante principal, y cortando dos orejas.

 Debuta de luces en el Puerto de Santa María, (Cádiz), con animales de herederos de José Luis Osborne, estando realmente muy bien y cortando incluso el rabo a su novillo, sintiéndose muy torero toda la tarde y sintiéndose apoyado por todo el público que existió a el espectáculo,   dando una dimensión que a partir de ese momento unos veinticinco festejos en este año.

  Debuto de novillero sin caballos en el pueblo madrileño de Villalva, cosa que no se esperaba, pero que disfruto al máximo igual que su debut de luces, recogiendo cuatro orejas y un rabo a unos animales de Flor de Jara, y con dos compañeros que le superaban  en edad de toreros y en festejos realizados, le hace meterse en el certamen de canal de Andalucía, y pese a que su incursión fue un poco dudosa, puesto que paso en primera instancia de rebote, luego dio la dimensión y que tener los mimbres necesarios para cortar incluso el rabo de uno de los novillos muy fuertes de  la ganadería de Torrealta.

                                                                               Llega el certamen de Castilla La Mancha Televisión, en este año 2015, y comenzando en él un  poco rebrincado, por un revolcón que le mete a la enfermería momentáneamente, sale sin dudarlo y cabía por momentos, es un Pablo Mora renovado, y nuevo que no se quiere dejar nada en el tintero ni en los vuelos de las telas que maneja con gran primor, no en vano consiguiendo un segundo puesto en la final del certamen.

  Perteneciendo a una escuela de toreros de la Comunidad de Madrid, en estos momentos está pensando el poder como mínimo llegar a donde el certamen anterior de Castilla La Mancha, poder llegar a la final y si puede ser llegar a esa gran final de Camino hacia las Ventas, que es con lo que sueña cualquier novillero en llegar a pisar ese ruedo tan grande y que tanto da, sin tener preferencia en ninguna plaza si no torear en cualquier sitio con la misma armonía,  ganas , entrega y verdad.  Tienen como ídolo a Julián López "El Juli", en la actualidad y le apasiona el toreo de el desaparecido Julio Robles.

  

  Le gusta el capote, pero tampoco le asusta la muleta prefiriendo los naturales con la mano izquierda, que es donde Pablo Mora se ve mas desenvuelto, no banderilleando mucho porque no le gusta a no ser que el novillo sea armónico y le vea claro a la hora de los embroques.

  Le gusta la rivalidad en el ruedo, porque piensa que el toreo, es eso, medirse en el ruedo haber quien es el mejor, además  sincerándose en su casa en los momentos que las cosas salen mal, discutiendo incluso con los maestros para corregir los fallos.

  Reivindica, que los carteles de las ferias, solamente se componen de los mismos participantes, y que en su corta carrera como novillero sin caballos, siente que no se les da las oportunidades necesarias a los que están empezando, que son las futuras figuras de las plazas y ferias , viendo a la figura del apoderado como una figura en la vida de un torero que tiene que estar muy pendiente y muy sincronizado entre ambos para que funcione.

 

A los chavales que quieren comenzar en esto de los toros les da todo su apoyo, y les dice lo que a el mismo le decían, que aquí hay que estar de verdad, desde el principio y hasta el final, que es muy duro el entrenamiento y todo lo que dejas por los toros, pero piensa que a el mundo del toro le hace falta aficionados jóvenes, que es un mundo muy bonito, que tiene su recompensa, cuando llegan esos triunfos que le reciclan la moral y las ganas de seguir en esto, y sin tener demasiadas ambiciones sino ser un torero de temporadas cortas, con poco número de festejos, estando en todas las ferias pero no todos los años y  que la gente este deseando de verle de torear de nuevo, porque lo que el busca es un toreo puro, artístico, de verdad y que las taquillas se llenen ilusionando a la gente que paga por ver a un torero, eso sí apoyando siempre a el mundo del toro.